Los dueños de las tiendas se vuelven creativos en medio de la escasez de piezas

Keith McMaster, presidente de Fireweed Heavy Truck & Equipment Repairs, una vez compró un asiento de avión para un arnés de cables.

"Y se sentó justo ahí en el asiento", dijo a los dueños de las tiendas en la primera conferencia Diesel Connect de Fullbay en Phoenix.

McMaster presta servicios, en general, a la industria del petróleo y el gas en Alberta, Canadá, y la caída de un camión puede costarle a una empresa decenas de miles de dólares por día.

"Si el cliente está dispuesto a pagar, iré", dice McMaster. Fireweed factura por hora con un recargo por combustible.

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Una encuesta rápida de la sala mostró que las partes eran un punto crítico para todos. McMaster cree que más redes podrían resolver gran parte de ese problema. Dice que muchas tiendas no se hablan entre sí, preocupadas de que las otras tiendas se lleven a sus clientes.

"Solíamos pensar que éramos una isla por nuestra cuenta", dice. Luego fue a una conferencia en Florida y se dio cuenta de que todos piensan que están solos en una isla. Estamos todos en la misma maldita isla.

Dice que hablar entre ellos facilitaría las cosas y que no le preocupa que alguien le robe el negocio.

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“Yo no voy a robarles sus clientes y ustedes no me van a robar los míos”, dice. "Ninguna otra tienda puede ofrecerme. No me ofrecen a mí ni a mi personalidad".

McMasters y los otros dueños de las tiendas no pudieron precisar la razón exacta por la que no ven las piezas que ingresan. Algunos dicen que fue un cierre en los puertos, algunos dicen que fueron problemas laborales en los puertos, algunos dicen que los puertos no son conseguir las piezas, tampoco.

Dice que, a veces, tiene que priorizar la reparación móvil sobre las reparaciones en el taller, manteniendo las piezas en el camión y haciendo que el taller las ordene.

"Es horrible que tengamos que hacer eso internamente, pero tengo que ponerlo en marcha esa noche", dice McMasters.

Él dice que las relaciones con sus proveedores han aliviado un poco la carga, y los dueños de las tiendas en la sala estuvieron de acuerdo. Esto incluye proveedores del mercado de repuestos que McMasters dice que se vio obligado a utilizar en medio de la escasez y que pueden ofrecer piezas del mercado de repuestos si el resultado final del cliente lo exige.

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En general, la escasez ha tenido un impacto negativo en sus resultados, dice.

El camión entrará, el equipo de McMaster le dará al cliente un presupuesto y el cliente se sentará en él. En el momento en que aprueban el presupuesto, el proveedor de McMaster ha vendido la pieza y la siguiente disponible viene con altos cargos de flete que el cliente no ha aprobado y que Fireweed tiene que comer.

"No es justo, pero está bien", dice. "Tratamos a nuestra gente como quiero que me traten a mí".